La vitamina d3 (colecalciferol) es crucial para el crecimiento y desarrollo saludables de los niños, especialmente para la salud ósea. Ayuda a que el cuerpo absorba el calcio y el fósforo, esenciales para formar y mantener huesos fuertes. La vitamina d3 también desempeña un papel importante en el sistema inmunológico y se ha relacionado con la salud mental.